Durante el embarazo, un mes antes de quedarte embarazada y durante la lactancia materna se aconseja suplementar la alimentación con una serie de micronutrientes. Está comprobado los beneficios de suplementar en esta etapa con ácido fólico, vitamina B12 y yodo.
El ácido fólico tiene una un papel fundamental en el desarrollo del sistema nervioso fetal. Y aunque hay alimentos ricos en ácido fólico, se ha comprobado que no se absorben igual que cuando se administran como suplementos. Tomar la dosis necesaria de ácido fólico garantiza la prevención de enfermedades como la espina bífida.
La vitamina B12 es necesaria para que se absorba correctamente el ácido fólico. De manera que si no tenemos suficiente vitamina B12 en el cuerpo por mucho ácido fólico que tomemos, éste no se absorberá correctamente. Además su carencia está relacionada con la aparición de anemias.
El yodo a su vez es necesario para la formación de hormonas tiroideas. Si no se forman estas hormonas se producen alteraciones cerebrales irreversibles.
De manera que suplementar con estos micronutrientes antes, durante y después del embarazo si estás con lactancia materna es fundamental para el correcto desarrollo del bebé.
La forma de tomar este suplemento es un comprimido al día preferentemente antes de las comidas. Es importante también no tomar más de la dosis necesaria, y sólo durante el período aconsejado para evitar la aparición de efectos secundarios adversos.
Y no olvides consultar con tu médico qué será el encargado de prescribir el suplemento necesario según el momento en el que te encuentres.
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