¿Con qué dilatación se puede poner la epidural?

La epidural se utiliza para disminuir el dolor que causan las contracciones uterinas en el momento del parto. La epidural se puede administrar siempre que las contracciones sean dolorosas y el parto se haya iniciado. 

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No obstante existen dos excepciones con respecto a la administración de la epidural: 

• La primera de ellas es cuando es necesario provocar el parto por indicación médica. Un ejemplo serían las gestaciones prolongadas en las que no se produce el parto espontáneamente, y de no provocarse el parto la gestación se podría alargar más allá de las 42 semanas. Para ello el ginecólogo indica la utilización de oxitocina, una hormona que causa contracciones uterinas. En estos casos aunque no exista dilatación, si las contracciones son dolorosas, la mujer puede solicitar la analgesia epidural. 
• Por otro lado, si la dilatación está muy avanzada y se prevé que el parto sea inminente, no está indicado el uso de la epidural. No es que esté contraindicado, sino que posiblemente no de tiempo a que haga efecto o incluso a que el anestesista la pueda poner. Poner una epidural requiere de al menos 15 ó 20 minutos, y otros 15 ó 20 minutos para que haga efecto.