Desde finales de diciembre del 2020 se ha iniciado la vacunación frente al covid-19, priorizando en la etapa inicial a los principales grupos de riesgo (personas mayores que viven en residencias y profesionales que trabajan en ellas).
Las vacunas que actualmente se están utilizando no están compuestas de virus vivos, aún así no se recomienda su uso durante el embarazo porque las mujeres embarazadas y los lactantes fueron excluidos de los ensayos iniciales de estas vacunas en la fase III. Lo que quiere decir que no se disponen de datos de seguridad específicos en la población de embarazadas y lactantes.
Dónde si se han realizado estudios es en animales, en los que no se ha visto ningún efecto dañino durante el embarazo.
Por todo ello la Sociedad Española de Fertilidad recomienda que el empleo de la vacuna durante el embarazo y la lactancia debe realizarse mediante la valoración de un profesional sanitario que valore los beneficios y los riesgos de la misma.
Por otro lado el Ministerio de Sanidad recomienda que aquellas mujeres que deseen quedarse embarazadas, tanto de forma natural como utilizando métodos de reproducción asistida, como medida de precaución deben esperar dos semanas desde la administración de la segunda dosis de la vacuna y un nuevo embarazo.
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